Muchas veces nos sorprende alguna conducta de nuestro hijo, sin percatarnos que nosotros hacemos eso mismo. El ejemplo es poderoso, y los hijos toman apuntes de nuestras propias conductas.
Muchas veces nos sorprende alguna conducta de nuestro hijo, sin percatarnos que nosotros hacemos eso mismo. El ejemplo es poderoso, y los hijos toman apuntes de nuestras propias conductas.