Es una gran fortuna el poder hacer, como parte de tu trabajo diario, lo que más te gusta. Pero también es importante recordar que el trabajo es muchas veces sólo un medio para obtener el dinero necesario para vivir. Y cuando un empleo o actividad legítima cumple este propósito, aún cuando no sea el “trabajo de nuestros sueños”, debemos realizarlo con gratitud y entusiasmo y encontrar otros momentos para hacer el proyecto personal que nos llena de satisfacción y por el cual sentimos verdadera vocación.
304. No hay trabajo malo
08
Abr
para cuando sabre si estoy en el podcast