Definitivamente es más fácil agradecer si lo aprendes cuando eres niño. El hábito se establece desde temprano y se acepta con más naturalidad. Sin embargo, nunca es tarde para sumarlo a nuestro repertorio de conductas. Con el firme propósito de hacerlo y concentrándonos todos los días en dar las gracias y poner atención en apreciar lo que se nos da y lo que tenemos, poco a poco alcanzaremos el objetivo.
490. Aprendiendo a agradecer
09
Feb